ASCER ha elaborado un informe sobre consumo energético, emisiones de CO2 y factura del que se extrae que la factura energética del sector en 2022 ha sido de 1.683 millones de Euros, casi un 80% más que en 2021 cuando la factura fue de 939 millones de Euros. El incremento de los costes energéticos ha disparado la factura sectorial a pesar de que el consumo de gas ha disminuido un 13%, una caída alineada con la caída de producción acumulada en 2022 del 15%. El peso de la factura de energía sobre la facturación total del sector ha pasado del 19% al 30%. El impacto en las empresas de este alza es muy grave y afecta de pleno a su liquidez y tesorería, provocando una reducción de la producción y afectando al empleo con ERTEs y EREs.
Como venimos alertando, la industria cerámica española ha perdido competitividad en los mercados, y la brecha se ha agrandado artificialmente puesto que competimos con industrias europeas que han recibido ayudas importantes por parte de sus gobiernos. En España seguimos esperando las ayudas directas y urgentes.
El informe se ha elaborado en base a datos extraídos de una encuesta interna de ASCER realizada entre sus empresas asociadas.
